martes, 3 de marzo de 2009

El cuerpo de la mujer.

Hay instituciones históricamente manejadas por hombres que siempre han decidido, y siguen decidiendo, sobre el cuerpo de la mujer. Hay culturas lejanas que se apropian del cuerpo femenino y ejecutan la escisión, la mutilación sexual femenina. Hay hombres que, de pronto, se adueñan del cuerpo de una mujer al azar, y a la fuerza, y a escondidas, y deciden qué hacer con él un rato. Hay incluso padres, padrastros, tíos, que deciden qué hacer con el cuerpo de una mujer por un rato. Hay jueces y juezas que dictaminan qué es lo que tiene que hacer una mujer con su propio cuerpo. Hay liberales que defienden a ultranza las libertades individuales, pero censuran la libertad individual de la mujer para decidir qué quiere hacer con su cuerpo, un cuerpo que no es propiedad privada de ellos. Hay opinólogos que opinan sobre qué debe hacer una mujer con un cuerpo, que es el suyo. Hay una tradición que determina qué debe hacer con su cuerpo una mujer y que no se inmiscuye en lo que el hombre haga con el suyo. Y si es mucho lo que éste hace, en todo caso será llamado ganador, playboy, tigre. Si lo hiciera una mujer sería ligera, indecente, descocada y otros adjetivos que ni siquiera se pueden decir porque son malas palabras. Hay asociaciones y ligas constituidas para regular lo que una mujer desee hacer con su cuerpo. Hay modas impuestas por el mercado que decretan cómo tiene que ser el cuerpo de la mujer. Hay demoras que demoran decisiones sobre el cuerpo de la mujer. Hay mujeres con pancartas que exigen que otra mujer no pueda decidir sobre su propio cuerpo. Hay dos chicas que nunca decidieron tener relaciones sexuales, ni tener un hijo. Pero alguien decidió por ellas que tuvieran relaciones sexuales. Después, alguien decidió que tuvieran el hijo, pues mucho antes alguien había decidido que el cuerpo de la mujer no fuera propiedad de ella, sino de ciertas instituciones (históricamente manejadas por hombres) que luego fueron tejiendo una cultura en la que el cuerpo de la mujer no es de ella, sino de las legislaciones, de los opinólogos, de las pancartas, de las asociaciones, de las juezas, de las ligas, de la tradición, de los otros. Hay dos chicas y cientos de chicas y cientos de mujeres que si toman una dolorosa decisión sobre su cuerpo, el de ellas, su propio cuerpo, resulta que están cometiendo un delito. El cuerpo de la mujer es el pecado; la dolorosa decisión de una mujer sobre qué hacer con su cuerpo es pecado. El cuerpo de la mujer está legislado. La dolorosa decisión de una mujer sobre qué hacer con su cuerpo es ilegal. Es ilegal en algunos países, y en otros no. Vaya a saber uno qué legislación hay en el cielo. Vaya a saber uno por qué todos podemos decidir sobre el cuerpo de una mujer. Vaya a saber uno cómo sería el mundo si el hijo de Dios hubiera sido una mujer. FOTO: GOLUBEV

8 comentarios:

Angeles dijo...

SI DIOS FUERA MUJER
¿y si Dios fuera una mujer?
Juan Gelman


¿Y si dios fuera mujer?
pregunta juan sin inmutarse

vaya vaya si dios fuera mujer
es posible que agnósticos y ateos
no dijéramos no con la cabeza
y dijéramos sí con las entrañas

tal vez nos acercáramos a su divina desnudez
para besar sus pies no de bronce
su pubis no de piedra
sus pechos no de mármol
sus labios no de yeso

si dios fuera mujer la abrazaríamos
para arrancarla de su lontananza
y no habría que jurar
hasta que la muerte nos separe
ya que sería inmortal por antonomasia
y en vez de transmitirnos sida o pánico
nos contagiaría su inmortalidad

si dios fuera mujer no se instalaría
lejana en el reino de los cielos
sino que nos aguardaría en el zaguán del infierno
con sus brazos no cerrados
su rosa no de plástico
y su amor no de ángeles

ay dios mío dios mío
si hasta siempre y desde siempre
fueras una mujer
qué lindo escándalo sería
qué venturosa espléndida imposibe
prodigiosa blasfemia.

Angeles dijo...

Se me olvido añadir, que el poema es de Benedetti.

Besos

Unknown dijo...

Conceptualmente, exquisitamente construído. Es digno de hacerlo circular el día de la mujer.
Los versos de Gelman, no lo conocía ( pura ignorancia de quien escribe ),
digno corolario de una página brillante.
Felicitaciones Massu !

massu dijo...

Petita: el poema es de Gelman o de Benedetti.
no me quedó claro
besote

massu dijo...

Gracias Dora!!!!
tenés libertad para tomar el texto y hacerlo circular.
besote

Angeles dijo...

El poema es de Benedetti, pero inspirado en la pregunta de Juan Gelman ¿Y si Dios fuera mujer?

La primera estrofa del poema dice:

“¿Y si dios fuera mujer?
Pregunta Juan sin inmutarse”

Y el resto del poema, es la contestación de Benedetti a esa pregunta.

Besos

Melibea dijo...

Massu, querida, me ha encantado. Estoy de acuerdo contigo. Es una pena que se nos siga considerando inmaduras en la sociedad. Y siento decir que, desgraciadamente, algunas mujeres comparten esa visión estrecha de que su existencia debe ser reglada en torno a su cuerpo y a su personalidad.

Un abrazo. Cuídate

Melibea dijo...

¡Ah! El poema es de Benedetti, según mi consulta.

Chao